Lateralidad y el mundo al revés

Sergio Albino Miranda

Aproximadamente el 12% de la población en el mundo es zurda, por lo que, de manera regular, tienen que adaptarse a vivir en un mundo diseñado por y para diestros. Este 13 de agosto se celebra el 30 aniversario del Día Mundial de los Zurdos. Dicha celebración trata de crear igualdad, y de romper los prejuicios que existen hacia esta minoría.

Una de las razones del éxito evolutivo que hemos tenido los humanos como especie humana, y que nos distingue del resto del mundo animal (exceptuando algunas otras especies de primates), es la coordinación entre las manos y nuestro cerebro, que nos permite utilizar cualquier herramienta con las manos. Sin embargo, no todos los humanos coordinamos nuestros movimientos de la misma manera; es decir, presentamos preferencia por utilizar dominantemente uno de los dos lados de nuestro propio cuerpo. Esto es, lo que se conoce como lateralidad.

La lateralidad es una condición que compartimos con el resto de los vertebrados. Como ejemplo; en el caso de otros primates y de los canguros, ellos utilizan de manera dominante la parte izquierda del cuerpo, en porcentajes del 50 % y 75 % respectivamente. A diferencia de ellos, en la especie humana existe un sesgo que hace que utilicemos predominantemente el lado derecho de nuestro cuerpo, y solo el 12% de las personas son zurdas.

Existen diversas teorías sobre por qué hay gente zurda. Por un lado, encontramos las explicaciones genéticas: donde la expresión del gen LRRTM1, que probablemente sea el responsable directo del uso predominante de la mitad izquierda del cuerpo. Por otro lado, hay investigadores que proponen que ser zurdo es el resultado de haber sufrido estrés en el útero materno; y otros estudios indican que se debe a un incremento en los niveles de testosterona de la madre durante el embarazo. Sea cual sea el origen ontogénico de la lateralidad, se produce porque ambos hemisferios cerebrales trabajan de manera cruzada: es decir, los zurdos tienen mayor actividad cerebral en el hemisferio derecho, y los diestros tienen mayor actividad en el hemisferio izquierdo.

Desde los orígenes de la especie humana han existido las personas zurdas, sin distinción de época o distribución geográfica. Seguramente, todos conocemos a alguna persona zurda en nuestro entorno social o familiar. En épocas pasadas, los zurdos eran perseguidos y vistos como signo de maldad. El rechazo hacia los zurdos se visualiza ya desde su origen etimológico: en distintas lenguas, la palabra “izquierda” quiere decir siniestro; En francés, gauche viene del verbo latino que significaba errar, y left, en inglés, proviene de lyff que en escandinavo significa roto, débil o torpe.

Ser zurdo no se trata de un defecto o una enfermedad; la única inferioridad o desventaja que presenta un zurdo, es su porcentaje dentro de la población mundial.

Ser zurdo o convivir con una persona que lo sea, puede ser raro, por ejemplo, al brindar con ellos y que tomen la copa con la mano izquierda; o curioso, al observar que utilizan el reloj en la mano derecha. Pero, indudablemente es divertido, como cuando tratan de utilizar el flexómetro y se encuentran los números al revés. Los zurdos son gente normal, como cualquier diestro, salvo que desarrollan la facilidad de hacer cualquier actividad con la mano izquierda, lo que implica tener que adaptarse a vivir en un mundo diseñado por y para diestros. En ocasiones enfrentan burlas, con frases discriminatorias de mal gusto, como decir con desdén «Ah, es que es zurdo». Cuando se les complica utilizar un abrelatas, las tijeras, el cucharón del agua; o la forma poco convencional de escribir, entre otras cosas.

De manera personal, considero que ser zurdo es una de mis cualidades favoritas; en distintos ámbitos de la vida cotidiana, los zurdos nos vemos favorecidos; como por ejemplo en los deportes (fútbol, tenis, box y béisbol), donde resulta ventajoso, y es más complicado vencernos. En el ámbito de la ciencia, personajes como Buzz Aldrin y Charles Duke fueron parte de la tripulación del Apolo XI, y los primeros zurdos en pisar la Luna. Por otra parte, las notas de campo de Charles Darwin, la bitácora de laboratorio de Albert Einstein y Marie Curie, así como los apuntes de Benjamín Franklin, Isaac Newton y Alan Turing fueron escritas con la mano izquierda, lo que enorgullece a la élite zurda.

El 13 de agosto se celebra el Día Internacional de los Zurdos. Su creación fue propuesta hace 30 años por Dean Campbell, fundador de la asociación “Left-handers International”, para crear conciencia y respeto sobre las dificultades y frustraciones que experimentan los zurdos en la vida cotidiana, en un mundo creado para diestros. Los zurdos tienen cosas muy buenas, el hecho de escribir con la mano izquierda no determina su capacidad, pueden ser tan buenos o malos como cualquier diestro. Ahora bien, ya que conoces un poco más sobre los zurdos ¿cuál es tu superpoder?

 

Pie de figura

Fig 1. Un ejemplar de ualabi rojo mostrando preferencia por utilizar su extremidad izquierda para alimentarse. Foto tomada de internet.

Fig 2. Los zurdos utilizan el hemisferio derecho del cerebro. Foto tomada de internet.

Fig 3. (página principal) Aproximadamente un 50 % de los chimpancés utilizan preferentemente su lado izquierdo del cuerpo. Foto tomada de internet.

Fig 4. Los zurdos tienen distintas formas de acomodarse para escribir. Foto tomada de internet