Los aliens de las moscas de la fruta: los insectos parasitoides

Jovita Martínez-Tlapa, Alma Altúzar-Molina, Lizbeth González, Adriana Santos, Enedina Cruz,

Olinda Velázquez, Rafael Ortega, Emilio Acosta y Martín Aluja

Artículo publicado en el Portal Comunicación Veracruzana el día 14 de diciembre 2021

Los insectos parasitoides se han usado en el manejo integrado de las Moscas de la Fruta que afectan la fruticultura Nacional.  La Planta Piloto de Parasitoides del Instituto de Ecología, A.C. - INECOL alberga 14 especies de parasitoides con fines de investigar su potencial como agentes de control biológico.

Palabras clave: moscas de la fruta, parasitoides, control biológico.

Las Moscas de la Fruta (Diptera: Tephritidae) representan una de las principales plagas de frutales a nivel mundial.  Seguramente habrás observado larvas o gusanos dentro de algunos frutos maduros como el mango, la guayaba, los cítricos, los zapotes y otros.  La presencia de gusanos en los frutos provoca restricciones fitosanitarias que impiden la comercialización de la fruta y pérdidas económicas muy importantes (Aluja y Mangan, 2008).  En el mundo existen alrededor de 5000 especies de Moscas de la Fruta y entre los géneros de mayor importancia comercial incluyen Anastrepha, Rhagoletis, Bactrocera, Toxotrypana y Ceratitis.

En México, las moscas del género Anastrepha son de mayor interés, destacándose la Mosca Mexicana de la Fruta o de los cítricos y mangos (A. ludens), la de los mangos (A. obliqua), las moscas de las guayabas (A. striata y A. fraterculus), la de los zapotes (A. serpentina) y la de la papaya (A. curvicauda) (Aluja, 1993).  Al alcanzar la madurez sexual, estas moscas se aparean y buscan poner sus huevos en un fruto hospedero que presente las condiciones más adecuadas para desarrollarse.  Dentro del fruto, las larvas eclosionan y se desarrollan hasta lograr un grado de madurez que coincide con la maduración y caída de los frutos al suelo.  Una vez en el suelo, las larvas salen de los frutos y se transforman en pupas o capullos.  Después de unos días (15 días o incluso meses en algunas especies como las moscas de las manzanas), los adultos emergerán de las pupas y se repetirá el ciclo (Figura 1).

Fig 1. Ciclos biológicos de las Moscas de la Fruta y sus parasitoides. a) Las hembras de las Moscas de la Fruta sexualmente maduras y apareadas

ponen sus huevos en un fruto hospedero. b) Las larvas eclosionan y se alimentan en el interior del fruto. c) Con la madurez,

los frutos se caen del árbol coincidiendo con el tercer estadio larvario, entonces las larvas salen de los frutos. 

d) En el suelo, las larvas pupan y después de un tiempo, emergen los adultos y el ciclo se reinicia.  e) Las hembras parasitoides ponen sus

huevos dentro de huevos, larvas o pupas de las Moscas de la Fruta. f) Dentro de la pupa de la Mosca de la Fruta, el parasitoide se alimenta y desarrolla. 

Pupa parasitada.  g) Al finalizar su desarrollo, el parasitoide emerge y se reinicia el ciclo.

 

Las estrategias más utilizadas para el manejo y control de las Moscas de la Fruta incluyen la liberación de machos de Moscas de la Fruta estériles (Técnica del Insecto Estéril), el control mecánico y cultural (embolsado de frutos, enterrado de frutos infestados, uso de trampeo y estaciones cebo, etc.), el control químico, y el control biológico, que utiliza enemigos naturales como insectos, hongos, bacterias, o virus para reducir la población de la plaga.  Una estrategia de control biológico mediante el uso de insectos parasitoides incluyen a las avispas del Orden Hymenoptera. Las larvas de un insecto parasitoide se alimentan dentro o superficialmente del cuerpo de otro insecto, al cual se le denomina “hospedero” y que termina muriendo una vez emergido el parasitoide (Godfray, 1994).

Es fascinante cómo el proceso de desarrollo del parasitoide ocurre, y es que, tal como se ve en las películas de aliens, los parasitoides adultos ponen sus huevos dentro de huevos, larvas o pupas de las Moscas de la Fruta y completan su desarrollo alimentándose del hospedero, hasta que emerge un parasitoide adulto en lugar de una mosca (Figura 1).  Los insectos parasitoides dependiendo de si se alimentan y desarrollan desde la zona más exterior del hospedero o en el interior de este se conocen como ecto o endoparasiotides, respectivamente.  Pueden ser solitarios si emerge solamente un parasitoide del hospedero o gregarios si emergen dos o más.  Pueden ser primarios o secundarios, si atacan a hospederos no parasitados o ya parasitados por un parasitoide primario; y, dependiendo del número de hospederos que ataca se clasifican en monófagos (un solo hospedero), oligófagos (un número reducido de especies hospederas) o polífagos (una alta diversidad de hospederos) (Godfray, 1994).

El control biológico de plagas con insectos parasitoides es una estrategia natural, amigable con el ambiente, generalmente se usan insectos parasitoides con alta especificidad que no dañan a otros organismos no blanco, la probabilidad de generar resistencia en insectos blanco es mínima, y, una vez establecido el agente de control puede perpetuarse a sí mismo por largos períodos, por lo que suele ser autosustentable, y generalmente se recomienda usar el control biológico en combinación con otras estrategias de manejo integrado como la Técnica del Insecto Estéril o TIE.

Fig 2. Colección de parasitoides de la Planta Piloto de Parasitoides del INECOL. a: Endoparasitoide solitario larvario, b: Endoparasitoide solitario de pupas,

c: Ectoparasitoide solitario de pupa, d: Endoparasitoide gregario de larvas, e: ectoparasitoide gregario de pupas. ♂: Macho, ♀: hembra. 

Parasitoides pertenecientes a las familias 1: Braconidae, 2: Eulophidae, 3: Diapriidae, 4: Eurytomidae, 5: Pteromalidae, 6: Chalcididae, 

Para lograr el control biológico de una plaga es necesario producir una gran cantidad de insectos parasitoides y realizar liberaciones repetidas en la zona de interés.  En nuestro país, se han evaluado liberaciones masivas, principalmente del parasitoide exótico (proviene de Asia) Diachasmimorpha longicaudata para el control de Moscas del género Anastrepha.  En la Planta de Producción de Parasitoides del Instituto de Ecología, A.C. - INECOL se cuenta actualmente con una colección de 14 especies de parasitoides (Figura 2).  Nueve especies de ellas atacan a larvas y cinco atacan a pupas de Moscas de la Fruta.  Se cuenta con especies de parasitoides de las familias Braconidae, Eulophidae, Diapriidae, Eurytomidae, Pteromalidae y Chalcididae.  Estamos estudiando su potencial para ser usados como agentes de control biológico, su comportamiento, su eficiencia y mecanismos de optimización de parasitoidismo, y hemos colaborado también con algunos productores veracruzanos, quienes han aceptado se liberen parasitoides en sus huertos (Figura 3).  El control biológico de estas plagas también se puede hacer conservando la naturaleza, particularmente algunos árboles nativos sin valor comercial donde los parasitoides se reproducen por miles atacando de manera natural a las larvas de las Moscas de la Fruta que ahí se desarrollan.  Esta modalidad se conoce como Control Biológico por Conservación y en Veracruz debería ser implementado masivamente (Aluja et al. 2014).

Fig 3. Liberación de parasitoides D. longicaudata y D. areolatus en huertos de mango, chicozapote, naranja, toronja y vegetación nativa

en las proximidades de Ídolos, Actopan, Veracruz y de D. crawfordi, U. anastrephae yO. hirtus en Buenavista, Emiliano Zapata en noviembre de 2020.

a) Plática con productores de mango sobre la liberación de parasitoides de Moscas de la Fruta, b) Liberación de parasitoides en huerto de mango,

c) Parasitoides sobre hojas de Mango.

 

La próxima vez que veas a un insecto parasitoide, ¡no lo mates!, no te hará daño, al contrario, ahora sabes que tiene una misión muy importante en el control de plagas.