El juego como una herramienta para fomentar la conservación de las especies

Dania García Hernández, Tania Hipólito Montiel y Francisca Vidal-García

La degradación ambiental y la contaminación que actualmente hay en nuestro planeta, han provocado cambios drásticos en las condiciones ambientales, ocasionando que un gran número de especies se encuentren en peligro extinción. Es necesario implementar alternativas para la conservación de las especies, esto se lleva a cabo mediante la educación ambiental.

 

Hace años, las explicaciones del profesor en el aula eran la única forma de enseñanza. Sin embargo, para lograr una mejor compresión, se debe integrar a los alumnos en los temas para que desarrollen sus habilidades de manera atractiva y divertida, sobre todo tratándose de asuntos ambientales. Gracias a las aportaciones de varias disciplinas como la Pedagogía, Psicología, Filosofía, Antropología y la Sociología, la educación ha dado un giro bastante amplio en la manera de enseñar a los estudiantes.

En este sentido, una manera divertida de aprender a conservar a las especies puede ser mediante el juego. Esta actividad, ha sido reconocida como una herramienta útil en el proceso de enseñanza, ya que posee objetivos claros y precisos, genera un proceso de enseñanza-aprendizaje ameno, afectivo, y por lo tanto, productivo. Algunos especialistas sugieren que la “actitud de juego” debe ser primordial para cumplir propósitos de enseñanza, es decir, que los participantes realmente deben sentir que “están jugando”, ya que esto determinará que adquieran o no conocimientos.

Crear y aplicar juegos enfocados a la conservación de las especies puede ser una manera entretenida para aprender y comprometer a las personas con el ambiente. A través de la solución de preguntas como “¿qué especies se encuentran en peligro de extinción?”, “¿cuáles son las principales amenazas que enfrentan?’”, “¿qué alternativas hay para su conservación?”, podemos enseñar a los niños y los jóvenes la importancia de conservar y proteger a las especies en peligro.

Los juegos pueden presentarse en cualquier momento, por ejemplo en talleres especializados, prácticas, repaso de actividades, al principio o al final de una clase, la idea es que los estudiantes se envuelvan en el tema al volverlo atractivo y agradable.

Para que el juego sea exitoso se debe motivar constantemente al grupo con el que se trabaje, jamás debemos permitir que los participantes pierdan el entusiasmo. También debemos ser justos al premiar a los ganadores para incentivar la participación en el futuro. El juego debe ser bien elegido para el grupo, esto depende del nivel y la personalidad de los estudiantes. Es importante tomar en cuenta que los juegos deben ser más fáciles al principio y la dificultad se debe ir incrementando. Las reglas en un juego deben ser claras y por ningún motivo deben cambiarse a la mitad del proceso.

Para la conservación de las especies se pueden implementar una gran variedad de juegos y actividades de reforzamiento. Los juegos posibilitan la expresión creativa, de conocimientos lingüísticos y socioculturales, pueden ser de movimiento, intelectuales, de imaginación, afectivos, de habilidad, sociales, entre otros. Por sus características, los podemos clasificar de la forma siguiente:

  • Juegos de observación y memoria: se indican para una práctica controlada del léxico y la retención de información. Ejemplo: memorama, rompecabezas.
  • Juegos de deducción y lógica: son apropiados para practicar el pensamiento crítico y la lógica, por ejemplo, se puede dar el final de una historia para que los estudiantes la completen haciendo preguntas. Así, podemos fomentar que busquen soluciones a temas y problemas planteados. Un ejemplo son los juegos de eliminación y los rallys, donde se avanzan estaciones mediante la solución de problemas.
  • Juegos con palabras: se proponen para actividades orales y escritas, e incluyen trabalenguas, chistes, adivinanzas.

Los juegos no sólo funcionan como una diversión o entretenimiento si no que aportan un aprendizaje en el cual muchas veces están enfocados a la conservación de la especies. Hay diversas clases de juegos dependiendo de lo que se desee practicar: de habilidades, de reto personal, de competencias, de colaboración, de simulación, de

asociación, adivinanzas, invenciones, juegos de mesa, los que implican movimiento y los que no.

El principal material con que se trabaja son los juegos de letras como los crucigramas, juegos de mesa y aplicaciones digitales. Estos juegos son mucho más eficientes en cuestiones de conservación del ambiente ya que tanto a los niños como a los adultos les resulta fácil comprender y resolver. Sin embargo, el desarrollo de juegos que pongan en práctica el movimiento del cuerpo, también es importante, así como aquellos que fomenten el respeto hacia la naturaleza mediante el contacto directo con ella.

El juego constituye un espacio de exploración, donde se pueden tomar decisiones, usarlo como una estrategia para la conservación de las especies es una buena idea. Nuestra misión es ofrecer alternativas didácticas que permitan transmitir el conocimiento científico de una forma atractiva, logrando que las personas adquieran la sensibilidad y responsabilidad por el ambiente que les rodea.

 

Dania García Hernández y Tania Hipólito Montiel son estudiantes de la Licenciatura en Biología del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Úrsulo Galván, Veracruz.

Francisca Vidal-García es Técnico de la Red Biología y Conservación de Vertebrados del INECOL.